Una vergüenza los arbitrajes recibidos por el Guadalupe y el Flecha de Juveniles en Plasencia. Los arbitrajes allí ya sabemos que suelen ser un poco dudosos en ocasiones o el comportamiento de algunos espectadores. Vergonzoso en especial el sufrido en el Plasencia -Flecha Negra. Hasta el entrenador de ellos tenia que dar la razón a los visitantes en algunas decisiones incomprensibles. Una mano clara del portero local para impedir el gol cuando el delantero se marchaba solo, con falta y tarjeta amarilla fue la primera cosa estraña, el arbitro aún sabiendo que era roja, decia que era muy pronto para sacarla. Un linea que levantaba siempre la bandera y el arbitro no hacia caso nunca (bueno si, para anular un gol legal a los visitantes) y varias tarjetas por agresiones que no quiso ver o cuando eran claras, sacárselas al agresor y al agredido. El entrenador local expulsado en la grada, dirigiendo casi desde la linea o dentro del campo todo el rato, dirigiéndose al arbitro para hacer cambios u otras cosas y este atendiéndole. El segundo entrenador fumando desde el banquillo, y un gorrilla que hacia las funciones alli de algo en el campo, insultando a todos los de Badajoz durante el partido. Durante el descanso el arbitro la paso de risas con una parte del sector de publico local, Pero claro el arbitro solo fue capaz de encararse varias veces al sector de publico visitante, que lo único que le preguntaba el por que de sus decisiones.
Una vergüenza los arbitrajes recibidos por el Guadalupe y el Flecha de Juveniles en Plasencia.
ResponderEliminarLos arbitrajes allí ya sabemos que suelen ser un poco dudosos en ocasiones o el comportamiento de algunos espectadores.
Vergonzoso en especial el sufrido en el Plasencia -Flecha Negra. Hasta el entrenador de ellos tenia que dar la razón a los visitantes en algunas decisiones incomprensibles. Una mano clara del portero local para impedir el gol cuando el delantero se marchaba solo, con falta y tarjeta amarilla fue la primera cosa estraña, el arbitro aún sabiendo que era roja, decia que era muy pronto para sacarla. Un linea que levantaba siempre la bandera y el arbitro no hacia caso nunca (bueno si, para anular un gol legal a los visitantes) y varias tarjetas por agresiones que no quiso ver o cuando eran claras, sacárselas al agresor y al agredido. El entrenador local expulsado en la grada, dirigiendo casi desde la linea o dentro del campo todo el rato, dirigiéndose al arbitro para hacer cambios u otras cosas y este atendiéndole. El segundo entrenador fumando desde el banquillo, y un gorrilla que hacia las funciones alli de algo en el campo, insultando a todos los de Badajoz durante el partido. Durante el descanso el arbitro la paso de risas con una parte del sector de publico local, Pero claro el arbitro solo fue capaz de encararse varias veces al sector de publico visitante, que lo único que le preguntaba el por que de sus decisiones.